Cómo esta Empresa B brinda acceso a la educación como una fuerza para el bien - Laureate

Cómo esta Empresa B brinda acceso a la educación como una fuerza para el bien

Este artículo fue creado en asociación con B The Change

El número de instituciones de educación superior en América Latina ha crecido exponencialmente desde inicios de siglo. Con más de 2,300 nuevas universidades en 33 países se ha casi duplicado el número de estudiantes matriculados. Pero este incremento en la oferta de educación superior en América Latina no se ha traducido siempre en mayor acceso para las familias de bajos ingresos.

La educación y la pobreza están inextricablemente relacionadas. La educación puede ser un camino para generar mayor riqueza ya que impulsa la movilidad económica y reduce la desigualdad. Pero el costo de estas instituciones, que son generalmente privadas y caras, representa una barrera hacía estas oportunidades. Muchas personas deciden trabajar en lugar de continuar sus estudios, especialmente entre el enorme número de personas en Latinoamérica que viven en la pobreza extrema.

Hay una Empresa B Certificada que espera revertir esta tendencia. Laureate International Universities es la red internacional de instituciones de educación superior que otorgan títulos más grande del mundo, que trabaja para ofrecer educación asequible y de calidad, con un fuerte enfoque en las áreas de ciencias de la salud, negocios, tecnología de la información, arquitectura y artes y diseño. Aunque muchas de sus instituciones se encuentran en América Latina, la red tiene un alcance global, con más de 875,000 estudiantes en más de 25 instituciones.

Laureate está comprometida a crear un cambio positivo y duradero en su labor como Empresa B, por la cual fue reconocida por la comunidad de Empresas B como Best for the World en 2019 en las categorías de Clientes y Gobernanza. En cumplimiento de esta promesa, tan solo en 2018, Laureate otorgó a sus estudiantes más de USD$ 700 millones en becas y descuentos. Más allá de ofrecer educación superior, los programas de Laureate están diseñados para que los estudiantes desarrollen las habilidades necesarias para no solo unirse a la fuerza laboral sino mejorarla.

“Creemos que todo lo que enseñamos debe enfocarse tanto en los resultados académicos como sociales”, dice Adam Smith, vicepresidente de comunicaciones y asuntos públicos de Laureate. “Se trata de construir una cultura en la que los estudiantes comprendan que sin importar la carrera que elijan, pueden aplicar su experiencia y habilidades para realizar una contribución positiva en el mundo”.

Los programas de Laureate impactan la vida de los estudiantes, inspirando la movilidad social e impulsando el emprendimiento social, una misión que crece con una nueva plataforma, Voces de Cambio Social. Este curso en línea gratuito es impartido por ocho jóvenes emprendedores sociales, que comparten su experiencia e ideas para apoyar a otros jóvenes que también quieren hacer una diferencia a realizar sus propios proyectos. Voces de Cambio Social es el resultado de la colaboración entre Laureate, la International Youth Foundation (IYF) y B Lab para potenciar ideas y, en última instancia, concretarlas como iniciativas para el bien social. A lo largo de este curso de cinco semanas, los participantes aprenderán cómo desarrollar sus ideas y aplicar las lecciones aprendidas de otras iniciativas exitosas.

“Queríamos asegurarnos de que hubiera un resultado claro y tangible”, dice Kallum Searle, director de asuntos públicos para Laureate Australia y Nueva Zelanda. “Cada uno de los participantes desarrollará un plan de acción concreto. Además, los estudiantes podrán integrar una red de apoyo con los otros participantes de su país.”

Seis Estudiantes Embajadores Laureate de América Latina asistieron al 2019 B Lab Champions Retreat para amplificar el impacto de la organización. B the Change habló con cada uno de ellos sobre lo que han aprendido hasta ahora y lo que esperan lograr, con el apoyo de Laureate.

Los Laureate Student Ambassadors con el cofundador de B Lab, Bart Houlahan, tercero desde la izquierda, en el B Lab Champions Retreat.

Angelica Moncada: Apoyando el emprendimiento juvenil en Honduras

Angelica Moncada cursa un MBA en marketing y negocios internacionales en UNITEC en Tegucigalpa, Honduras. Su viaje como emprendedora social inició en 2012 cuando fundó Club Amor, una organización sin fines de lucro que brinda apoyo a niños diagnosticados con cáncer en un hospital público en Tegucigalpa. “Ser parte de la comunidad Empresa B significa ser parte de un movimiento de personas que quieren tener un impacto en el mundo, que es mi enfoque principal”, dice Moncada.

Su trabajo con Club Amor le ha abierto oportunidades globales, como por ejemplo su labor con Laureate International Universities y la comunidad Empresa B. En 2017, Moncada realizó un programa de pasantía de un año con el equipo de Asuntos Globales de Laureate, apoyando las áreas de impacto social, integración Empresa B y premios globales. Actualmente, Angélica ha regresado a Honduras donde espera compartir sus conocimientos y motivar a otros jóvenes en su trabajo como coordinadora de emprendimiento y juventud en UNITEC Honduras.

“Actualmente, mi labor principal es impartir clases de emprendimiento a jóvenes estudiantes”, nos dice. “Es una de mis grandes satisfacciones: estar frente a los estudiantes, hablarles de millennial a millennial, y poder compartir con ellos mi experiencia y las oportunidades que he tenido”.

Barbara Marinho: Ayudando a los niños a vencer el cáncer en Brasil

Barbara Marinho, estudiante de medicina en Universidade Potiguar (UnP) en Brasil, ha sido una apasionada de la medicina humanitaria desde su infancia.

“Cuando era niña, mi hermana de 8 años fue diagnosticada con glioblastoma multiforme, un tipo de tumor cerebral muy agresivo”, dice Marinho. “Pasé mucho tiempo en un hospital con mi familia, así que antes de comprender que quería ser médico, sabía que quería ayudar a otras personas como mi hermana. Ahora, trabajo en el mismo hospital donde falleció, con otros niños que luchan contra el cáncer”.

La responsabilidad social ha sido para Marinho una prioridad en su experiencia como estudiante. Como miembro de la Federación Internacional de Asociaciones de Estudiantes de Medicina (IFMSA), ha sido voluntaria en docenas de intervenciones sociales y de salud en su comunidad. Marinho es motivada por la misión de promover la compasión y la humanidad en la educación y práctica de la medicina, especialmente en comunidades marginadas, y espera continuar este enfoque en su trabajo a futuro.

“Quiero practicar la medicina humanitaria dentro y fuera de Brasil. He trabajado con Médicos Sin Fronteras y me gustaría seguir trabajando con ellos”, dice Marinho. “Me interesa mucho el campo de la salud global, quiero conocer otras realidades y culturas y servir como médico en otros países así como en Brasil”.

Christian Cullen: Construyendo hogares y oportunidades en Brasil

Luego de 10 años trabajando en el mundo de los negocios, Christian Cullen se dio cuenta de que para hacer más bien en el mundo, necesitaba priorizar el beneficio social sobre el beneficio financiero. Así que cambió de carrera profesional para abordar una de las mayores formas de desigualdad en su país de origen, Chile: la vivienda.

“Se me ocurrió que la mejor manera de ayudar era comenzar una empresa de construcción para construir casas sostenibles, para que la gente no tenga que preocuparse por el clima o el aislamiento, el agua, la electricidad, nada de eso. Solo tienen que vivir”, dice Cullen.

Actualmente es estudia construcción en el Instituto Profesional AIEP en la ciudad de Talca, donde participa activamente como voluntario en iniciativas de impacto social. Su objetivo actual es crear una organización destinada a reducir la brecha de vivienda en Chile, que afecta a más de 2 millones de personas.

“Viajé mucho en mi trabajo anterior. Especialmente en Europa, tienen buenas ideas para soluciones de vivienda. Pero necesito tomar estas ideas y adaptarlas al contexto chileno”, dice Cullen.

Gabriella Saporiti: Fundando su propia Empresa B en México

Gabriella Saporiti es empresaria y candidata a MBA en la Universidad del Valle de México (UVM) en la Ciudad de México. Actualmente está construyendo su propio negocio de joyería hecha a mano, Carmelate, de forma tal que contribuya a la comunidad y genere empleos de calidad.

“Estamos creciendo rápidamente y realmente espero pronto poder ofrecer puestos de trabajo, especialmente para las mujeres”, dice Saporiti. “Quiero crear un excelente ambiente de trabajo, pagarles a mis trabajadores de manera justa, enseñarles cómo hacer bien el trabajo. Quiero establecer condiciones para que ellos y sus familias tengan una buena vida”.

Saporiti incorpora prácticas comerciales sostenibles en su empresa porque se alinean con sus valores personales. Su pasión por ayudar a los demás impulsa su trabajo como voluntaria y miembro de la junta directiva en el hogar de niños más grande de la Ciudad de México. Ella coordina donaciones, el trabajo con patrocinadores y pasa bastante tiempo con los niños.

“Soy una Empresa B porque comparto todos estos valores. Soy una persona que se preocupa por el medio ambiente y la comunidad, por eso para mi ser una Empresa B es un camino natural para mi negocio “, dice ella.

João Fernandes: Educating Young Changemakers in Brazil

João Fernandes estudió relaciones internacionales en Centro Universitário IBMR en Río de Janeiro, Brasil, donde también obtuvo un MBA con especialización en administración de negocios internacionales. Su incursión en el campo del emprendimiento social ha dado un giro a su vida, nos dice, algo que en gran medida ha sido producto de su educación.

“Logré obtener una beca completa porque venía de un entorno muy pobre. Fue importante para mí porque crecí en una de las comunidades más peligrosas de Brasil. Experimenté muchas guerras y violencia entre pandillas, por lo que mi familia decidió mudarse a otra parte de la ciudad”, dice Fernandes. “Fui el primero de mi familia en tener acceso a la educación superior y experimentar todo lo que estoy viviendo ahora, mudarme al extranjero, terminar mi MBA y obtener un muy buen trabajo”.

Actualmente realiza una pasantía de un año con el equipo de Asuntos Globales de Laureate, sirviendo e inspirando a otros estudiantes a convertirse en creadores de cambios sociales.

Una vez concluida su pasantía, Fernandes sueña con estudiar una maestría en comunicaciones, trabajar en el campo de la educación y continuar promoviendo la misión de Laureate y los valores del movimiento Empresa B.

“Creo que las Empresas B Corps son la respuesta a muchos de los problemas actuales”, dice. “Es algo que muchos intentaron, sin embargo, no se había logrado crear una estructura que ayude a la empresas a crear un impacto positivo. Esta certificación es de gran valor para la compañías y me gustaría apoyar a otras empresas a convertirse en Empresas B, para hacer crecer esta comunidad de líderes que buscan crear un mayor impacto”.

Lisa Mestres: Enseñando inglés a niños en Perú

Como estudiante de negocios internacionales en la Universidad Privada del Norte (UPN) en Trujillo, Perú, Lisa Mestres intenta/ aprender más sobre la diversidad internacional y hacer conexiones a pesar de las diferencias. Su experiencia de mudarse de Estados Unidos a Perú a una edad temprana le generó un interés especial en enseñar inglés.

“He trabajado enseñando inglés a niños en una escuela privada, y es satisfactorio, pero mi deseo es ayudar a personas que no tienen los medios para aprender inglés, sueño con ayudarles a alcanzar sus metas y acompañarles en el proceso”, dice Mestres. “Están acostumbrados a ver mucha necesidad a su alrededor pero no a tener personas que les ayuden y acompañen”.

Más allá de sus estudios, Mestres trabaja como maestra voluntaria de inglés para niños viviendo en comunidades marginadas. También participa activamente como voluntaria en diferentes organizaciones en la UPN y en su comunidad. Mestres tiene el compromiso de crear un impacto positivo en su vida personal y profesional.

“Me siento identificada con los valores Empresa B porque significan que los negocios son una fuerza para el bien, por lo que puedo tener mi propio negocio y brindar educación a los niños que lo necesitan. Ese es en última instancia mi objetivo: convertirme en una Empresa B y enseñar inglés a personas que realmente lo necesitan en mi país “, dice ella.